Cómo hacer la carta de presentación más eficaz

Cómo hacer la carta de presentación más eficaz

Todos hemos escuchado en algún momento aquello de “la primera impresión es la que cuenta”. En las entrevistas de trabajo estas palabras cobran gran importancia, llegando a determinar un resultado u otro.

¿Te has preguntado cómo puedes lograr ‘conquistar’ al reclutador sólo con presentarle una carta de presentación? La clave está en saber cómo redactarla para llamar su atención y destacar entre los demás. Porque lograr un trabajo con una carta llena de ‘blablabla’ sólo pasa una vez en la vida, y ya le ocurrió a Julien Chorrier.

Cómo hacer una carta de presentación potente en 5 pasos

Toma nota de lo que deberías hacer y de lo que no para conseguir ese empleo con el que siempre has soñado. He aquí algunos tips para hacer tu carta de presentación:

1) Sé concisoLo primero que hay que entender a la hora de redactar una carta de presentación es que ésta no es una mera réplica o resumen de tu currículum vitae. Tampoco tiene sentido que te esmeres en escribir un ensayo sobre ti. Recuerda: cuanto más breve seas, mejor.

Ten presente que seguramente este documento caerá en manos de personas ocupadas que tendrán decenas de candidatos por entrevistar y el mismo número de cartas y currículums que leer.

El propósito del escrito es llamar la atención de manera inmediata y lograr destacar entre todas las personas que están optando a la misma vacante que tú, así que redacta entre dos y tres párrafos llenos de información relevante.

2) Enfócate en las palabras clave: Dar muchas vueltas a la misma idea en un texto provoca que el lector se desinterese con facilidad, así que no te andes por las ramas y enfócate en las palabras claves que definan tu experiencia y cualidades. Centra tu discurso en aquello que quieres que sea el foco de interés de quien te lee.

Elige cinco palabras clave que definan la imagen que quieres dar de ti mismo (tanto profesional como personalmente) y utilízalas en cada uno de los párrafos de manera sencilla, fluida y sin tecnicismos.

Por ejemplo, si tienes dominio de algún idioma, puedes hacer uso de la palabra clave «Dominio del idioma inglés», seguido de una oración que conecte dentro del contexto mencionado.

Pon delante siempre tus habilidades (sobre todo si se adecúan al perfil solicitado por la empresa) y emplea verbos que se orienten a acciones positivas como el ‘desarrollar’, ‘optimizar’, ‘incrementar’, ‘ejecutar’, ‘generar’, ‘planificar’, ‘supervisar’ o ‘implementar’ entre otros.

3) Define aspectos resaltantes: Hay una estrategia que se conoce como «bullets» o «cabezas», que consiste en sintetizar en encabezados tres aspectos sobresalientes sobre tus conocimientos y destrezas, y conectarlos con el perfil que busca la empresa. De esta forma resultas más preciso, directo y muestras un interés mayor por el puesto vacante.

4) Muéstrate interesado: Incorpora en el texto algunas líneas en las que expreses lo mucho que significa para ti el empleo, la organización o la actividad para la cual solicitan tu experiencia. Menciona tus habilidades y explica por qué estás cualificado para el puesto. Eso sí, evita caer en el ruego. El texto no debe dar a entender que estás suplicando ser el elegido. Es bueno mostrarse entusiasta, pero en su justa medida.

No olvides mencionar por qué quieres trabajar en esa empresa concreta, así como tu experiencia y posibles aportaciones en el campo solicitado.

5) Cuida la redacción y la ortografía: Aunque no lo creas, este es uno de los aspectos más determinantes de tu carta de presentación. ¿De qué te sirve mencionar que eres un excelente profesional si tu redacción carece de orden en las ideas, signos de puntuación o, sencillamente, hay palabras mal empleadas o mal escritas?

La mala ortografía es muy amiga de los empleadores, ya que les ayuda a descartar de un plumazo a quienes entregan una carta de presentación con errores e incongruencias en la redacción.

Escribe, lee, asegúrate de que las palabras tengan el significado que crees que tienen, ojea el texto un par de veces y, si es necesario, pide a una o dos personas que lo revisen para estar seguro.

La estructura de la carta de presentación

Hay otras consideraciones que debes tener en cuenta, como qué información busca una empresa en la carta de presentación de un candidato y la estructura de la misma:

1) Saluda siempre:  La mejor forma de empezar tu carta es saludando y dejando saber al reclutador que el documento va dirigido a su persona (y no a cualquier otra del departamento). Asegúrate de escribir los datos correctamente.

2) La introducción: Este es el punto de partida de una carta de presentación, donde debes explicar el motivo de su redacción. No divagues demasiado, ve al grano y sé directo con tu propósito. Menciona si es una respuesta a una oferta de trabajo concreta, un anuncio general o iniciativa propia.

3) Desarrollo: Es la parte clave del texto, ya que es el momento de ‘venderte’ como profesional ante el reclutador. Debes lograr captar su atención. Escribe tu experiencia, tus logros y tus conocimientos de forma clara y sin ser caer en la arrogancia.

4) La acción: Tras el desarrollo, explica que estás disponible e interesado en el cargo o puesto que ofrecen. Sé natural y respetuoso, ten en cuenta que estas personas no son tus amigos y, por lo general, son profesionales serios. Eso no significa que no puedas tomarte alguna licencia dependiendo del sector o de la empresa concreta a la que te dirijas. Dependiendo del perfil de la compañía y del reclutador, puedes permitirte tutearlos o no, y dar más o menos rienda suelta a tu creatividad. Eso sí, siempre de forma elegante, sutil y educada.

5) La despedida: Sé cordial y muy profesional cuando te despidas en la carta. No des demasiadas vueltas e incluye tus datos de contacto. Si quieren localizarte y no encuentran fácilmente tus datos, otro candidato puede hacer que se olviden de seguir buscándolos.

Tipos de carta de presentación

Existen varios modelos de cartas de presentación y debes conocerlos todos para poder elegir siempre la correcta. Ten en cuenta tu experiencia y tus objetivos sin perder de vista lo primordial: causar la mejor impresión.

1) Carta sin experiencia: Para los profesionales que acaban de llegar al mercado laboral y tienen una escasa o nula experiencia. En este caso puedes aprovechar el espacio para destacar qué fue lo que aprendiste en los años anteriores e incluir aspectos personales como habilidades y aptitudes que puedan servirle a la empresa. Menciona tu motivación para ingresar a la empresa y lo útiles que son los conocimientos adquiridos en los cursos que has realizado para desempeñar el puesto que solicitas.

2) Respuesta a una oferta de trabajo: Esta carta es la que debes escribir como respuesta a una oferta de empleo determinada y en cuyo proceso de selección quieres ser tenido en cuenta. Incorpora datos como el nombre de la empresa, cuál es el puesto que deseas, dónde publicaron el anuncio y cómo te enteraste de la vacante, además de la fecha en que se publicó.

Esa información te ayudará a dinamizar tu carta y mostrará a los empleadores que estás realmente al tanto de lo que hacen, lo cual te brindará una diferenciación con los demás candidatos.

3) Carta de autocandidatura: Su propósito es presentarte y que te tengan en cuenta para próximos procesos de selección de personal. Se hace de manera espontánea y se utilizan muchos de los pasos ya mencionados.

Puedes incorporar datos como el nombre de la persona encargada de reclutar personal, el puesto o los puestos que te interesaría ocupar y enfatizar que deseas participar en futuros procesos de selección, explicando por qué y qué puedes aportar a la empresa.

¿Cuáles son las ventajas de redactar una carta de presentación?

1.- Sirve como complemento de nuestro currículum vitae.

2.- Nuestra candidatura se muestra más cercana y humana.

3.- Podemos hacer uso de nuestra capacidad de persuadir y de comunicar.

4.- Nos permite recalcar en qué puesto de trabajo estamos interesados.

5.- Podemos aprovechar la carta de presentación para mostrar lo que sabemos sobre la marca o empresa.

6.- Indicamos nuestra disponibilidad para el empleo y, además, hacemos saber que estamos interesados en la oferta y cómo nos enterasmos de ella.

Es importante que sepas que la carta de presentación y el resumen curricular son dos documentos absolutamente independientes que no tienen por qué guardar una relación estrecha.

No pierdas de vista el objetivo de la carta de presentación: suscitar interés en la persona que está buscando empleados y conseguir que quiera conocer más a fondo tus destrezas.

 

1 comentario
  1. Mirta D'Ambra Dice:

    Muy interesantes consejos , nadie esta dispuesto aller 100 veces lomismo
    Y la Biblia pocos la leen

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